lunes, 7 de abril de 2014

Vamos a la cama que hay que descansar

El hecho de descansar es un aspecto fundamental en nuestra vida, las tres cuartas partes de nuestra existencia la pasamos durmiendo, durante el descanso nuestro cuerpo es reparado y recargado de las energías necesarias para afrontar un nuevo día, tanto es así que si por cualquier motivo este hecho no se produjera llegaríamos a enfermar o tener lesiones graves.

Por tanto debemos de prestar mucha atención al momento en el que nos vayamos a descansar para nuestro propio bienestar personal, hay muchos factores que pueden incidir en que no descansemos correctamente con las consiguientes secuelas tanto en plano físico como psicológico.

Problemas musculares, óseos, nerviosismo, insomnio, stress, etc. Que nos pueden provocar además de las consabidas enfermedades estados de mal humor que repercuten negativamente en nuestra relaciones con los demás y problemas en el trabajo, ya que podemos llegar a no rendir lo suficiente.

EL DORMITORIO

Cómo hemos dicho anteriormente existen multitud de factores y condicionantes que repercuten a la hora del descanso. Para la filosofía Feng Shui en el que es tan importante el tema de la orientación, la disposición del espacio y la forma, el dormitorio y su organización es clave para que las energías fluyan correctamente con sus efectos positivos para la salud y el cuerpo. Te mostramos algunas consideraciones que puedes tener en cuenta a tal efecto.

El dormitorio debe estar lo más alejado de la puerta de entrada al hogar, la cama debe tener cabecero y estar apoyado en una pared sólida que no sea la que pegue al cuarto de baño, tampoco poner el cabecero de bajo una ventana, evitar dormir con los pies hacia la puerta de entrada al dormitorio, etc.


Otras investigaciones como las realizadas por el Centro del Sueño de Berkeley en Estados Unidos, recomiendan poner el cabecero de la cama orientando hacia el norte quedando así los pies hacia el sur, ya que se demostró que se mejoraba la profundidad del sueño y la disminución de la presión arterial.

También hay estudios en los que demuestran que la exposición continuada a energías u ondas electromagnéticas perjudican la salud, por tanto se aconseja sacar del dormitorio o alejarlos lo más posible de la cama todos los aparatos eléctricos así como móviles, aparatos wifi, etc.

LA CAMA Y EL COLCHÓN

Pero si por cualquier motivo existen impedimentos para que puedas ubicar el dormitorio e incluso organizarlo de esta forma, hay otras opciones, tan importantes o más para tener un buen descanso y que están al alcance de todos, como son la de procurar tener un buen colchón, una buena almohada y un buen somier.

En cuanto al colchón y la almohada podemos decir que muchas veces son los culpables de que no durmamos bien, debido a la mala calidad con la que están fabricados, que se agrava con los años de su uso pudiéndonos provocar incluso determinadas dolencias físicas.

Hoy en día la investigación y la innovación de las empresas del sector han hecho que tengamos colchones y almohadas de muy buena calidad y resistencia, pero también tenemos que decir que a pesar de esto, no existe un colchón que sea 100% perfecto en todo y para todos. Por muchas ventajas y beneficios que tenga un colchón también tienen algún inconveniente, por lo que a la hora de elegirlos debemos cerciorarnos y valorar cuál es el que mejor se adapta a nuestras circunstancias, lo que hace de ésta elección algo muy personal.

Recomendamos también que si tenemos alguna enfermedad o dolencia grave ósea o muscular sigamos las orientaciones de doctores y especialistas de este campo.


De modo general, porque la variedad y tipos en el mercado es muy amplia, indicamos los colchones y almohadas más valorados y utilizados a la hora del descanso como son el viscoelástico, el de látex, el viscolátex y el futón.

El colchón viscoelástico es el que más y mejor se adapta al cuerpo, por lo tanto es muy beneficioso para personas con problemas musculares y óseos, es un material sintético y por ello no presenta problemas a la hora de la traspiración, al tener un efecto más o menos envolvente, dependiendo de su calidad, algunas personas pueden tener sensación de calor por lo que sería un incoveniente para ellas.

El colchón de látex es el más natural y orgánico, son transpirables e higiénicos y son muy cómodos porque se adaptan bien al cuerpo, por otro lado se pueden deteriorar muy pronto si el dormitorio no está bien ventilado y tiene humedad, por ello necesitan un somier de láminas para que pueda ventilar.

El colchón viscolátex es una fusión de los dos anteriores, por lo que de acuerdo a la calidad de su fabricación puede presentar más o menos ventajas.

El futón, suele ser un colchón de estilo oriental relleno con diversos materiales naturales de unos 5 cm en total, lo que hace que sea muy manejable a la hora de guardar y trasladar, ya que se puede doblar fácilmente, en contra tiene su dureza a la que muy pocos están acostumbrados.

Nada más esperemos que encuentres el colchón que necesitas y sobre todo que descanses bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario